Conjunto de procedimientos, estrategias, y técnicas de evaluación, tratamiento preventivo y rehabilitador, cuyo objetivo es mejorar o corregir el desequilibrio o alteraciones de la musculatura orofacial, conseguir nuevos patrones musculares y eliminación de los hábitos orales nocivos. La TM se aplica en las siguientes alteraciones o trastornos: • En los tratamientos de ortodoncia, fundamentalmente en los casos que existe una respiración bucal y en los casos en los que hay que corregir la posición de la lengua. También cuando hay que corregir los problemas del habla o de la pronunciación. • Trastornos o en patologías de origen neurológico central o periférico; como en el caso de los accidentes cerebrovasculares (ACV) y traumatismos craneoencefálicos. • Enfermedades neurodegenerativas como en el Parkinson, en la esclerosis múltiple y en parálisis faciales, que producen alteraciones en la musculatura orofonatoria. • Parálisis Cerebral Infantil (PCI). • Trastornos congénitos (fisura palatina, labio leporino, etc.). • Trastornos genéticos (síndrome de Down). • Alteraciones del habla de origen funcional; como las dislalias funcionales, es decir, cuando los niños hablan mal, sin que exista una causa neurológica, ni haya afectación anatómica de los órganos fonoarticulatorios. • Malformaciones faciales y craneales de origen adquirido; por ejemplo cirugía maxilofacial de cabeza, de cuello o por accidentes, que dejan como secuela alteraciones en la musculatura orofonatoria. La terapia se centra básicamente en ejercicios de praxias, técnicas de estimulación mecánica y/o táctil, masajes y en el control postural. La colaboración de la familia es imprescindible para conseguir los objetivos, por lo tanto, se recomienda realizar lo siguiente: • Realizar los ejercicios frente al espejo, con la ayuda de un familiar, que servirá de modelo. • Realizar los ejercicios al menos una vez al día, cada uno como mínimo cinco veces. • Evitar la fatiga, el cansancio y la monotonía. • Elegir un momento para realizar los ejercicios en que el paciente esté descansado. • No es aconsejable realizar los ejercicios inmediatamente después de comer. Áreas a trabajar: • Ejercicios de respiración. • Ejercicios de succión. • Ejercicios de masticación. • Praxias linguales. • Praxias labiales. • Praxias mandibulares. El tratamiento será más efectivo si se practica de forma intensiva. Se aconseja dedicar periodos de aproximadamente 10 minutos, 3 veces al día y si es posible cada ejercicio 5 veces.